HUMOR ACIDO mantiene su liderazgo

Es tan difícil mantenerse en la cima como alcanzarla y eso es lo que sucede con un velocista generoso como HUMOR ACIDO (EMPEROR RICHARD), que a su conquista del Gran Premio Internacional Ciudad de Buenos Aires (G1 – 1000 metros), le agregó otro impacto de grado, también en la recta de Palermo, en el marco del Clásico Coronel Pringles (G3 – 1000 metros).

Al igual que aquella victoria en la jornada del 1º de mayo, el velocista nacido en el Haras la Pasión se anotó otro impacto, como para mantenerse arriba en la categoría.

Con autoridad y contundencia, el caballo que es entrenado en el interior del país por Luis Gaitán, encontró en Pablo Falero al compañero ideal en esta parte de su campaña.

Juntos fueron terminantes en la fecha el República Argentina y esta vez se mostraron tan superiores como en ocasión de aquel G1, con los colores del Stud La Tutina.

Sin embargo, no es casualidad el buen momento del hijo de EMPEROR RICHARD, ese padrillo que recayó en nuestra cabaña -tras defender las sedas del Stud Rubio B.- por una lesión que lo privó de conseguir objetivos mayores.

Hoy, es uno de sus hijos el que se luce en las pistas y ya atesora reiterados logros en el plano clásico, incluso en la máxima categoría (G1).

Emperor Richard reúne todo para destacarse: Un físico privilegiado, conformación física y un pedigrí soñado. Vale decir que su padre no reviste mayor presentación y basta con mencionarlo: SOUTHERN HALO. Incluso, hay que sumarle una de las mejores ramas maternas del elevage nacional –6-f-, también conocida como la familia de la E, que tiene en EMPERIC a su madre fundacional.

HUMOR ACIDO demostró estar a la altura de los mejores. Alcanzó su sexto impacto, cuarto de jerarquía –ya había ganado un G1 y otro G3 a los dos años- en 21 gestiones. Atraviesa el mejor momento de su campaña y aún queda mucho camino por recorrer.